Septiembre, el mes que concita la atención de la industria de la moda, es el momento elegido por Desigual para el lanzamiento de su campaña FW22. Con un mensaje rotundo y claro, la marca lanza una invitación global para que todo el mundo descubra sus nuevas propuestas para esta temporada.
Desigual huye de artificios y deja que los looks hablen: el layering y las combinaciones audaces expresan el dinamismo, el carácter y la actitud positiva propios de la firma.
Con este statement en clave aspiracional, Desigual se reivindica como un agente a tener en cuenta en el ecosistema de la moda. El objetivo de la marca es reconectar con su audiencia y a la vez seducir a una nueva generación de compradoras. Todas estas mujeres tienen algo en común: la voluntad de expresar su personalidad genuina a través de la ropa y accesorios que eligen. Desigual quiere convertirse en una referencia para ellas y con esta campaña pretende captar su atención y contar con su consideración.
La modelo Grace Elizabeth; que ha trabajado con Victoria’s Secret o Esteé Lauder y que ha desfilado con Fendi, Chanel o Schiaparelli; repite con Desigual y protagoniza la campaña.


Las imágenes en blanco y negro cobran protagonismo en la campaña, precisamente, para reivindicar la esencia de la marca. También en color, las imágenes reflejan los estampados y tonos característicos de Desigual, así como el siempre en tendencia, denim.
En definitiva, una campaña -y una colección- con las que se presenta un nuevo Desigual: más audaz, más joven y con unos códigos más elevados, más moda.
Créditos
Photographer: Mario Sorrenti · Stylist: Elodie David · Talent: Grace Elizabeth