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¿Y si los regalos cayeran del cielo? ¿Y si los zapatos y complementos de tus sueños cayeran a tus pies por sorpresa? ¿Y si ese sueño se hiciera realidad? Esa es la magia propuesta por Roger Vivier para su tradicional corto navideño. En Neverending Christmas, los códigos y el estilo de alta costura de la Maison se muestran con un aire travieso. Virginie Ledoyen es la heroína elegante y enigmática de este cortometraje, obra del director creativo Gherardo Felloni.  Virginie Ledoyen interpreta a una joven cenando sola en Nochebuena. Mientras se prepara para ocupar su lugar en la mesa tropieza con un paquete de regalo, lo desenvuelve y descubre un par de sandalias Vivier Marlene de terciopelo rojo y una tarjeta que le pide que cante una canción. Ella lo hace y… otro regalo cae frente a ella. En el interior hay un bolso magnífico, el Viv’ Cabas Flower Strass ZigZag, junto con otra tarjeta pidiéndole que prepare un pastel. Mientras prepara una pièce montée aparece un magnífico par de botas rosas Belle Vivier Cuissarde. A continuación, un adorno navideño la guía hasta un árbol de Navidad donde la esperan un par de zapatos de tacón brillantes. Malas noticias, la tarjeta le dice que se despierte, todo fue solo un sueño. Ella se encuentra sola de nuevo excepto por un adorno navideño que rueda por el suelo, llevándola a un nuevo regalo. ¡El sueño es real después de todo!  Virginie Ledoyen aporta un espíritu travieso a esta historia navideña con estética vintage pero contemporáneo en espíritu. La actriz francesa, conocida por sus muchos papeles memorables en el cine francés y extranjero, recuerda a la joven Alicia en el País de las Maravillas de Lewis Carroll. Su alegría en la pantalla es compartida por la Maison Roger Vivier que, además de su conexión de por vida con el cine, también sabe combinar la elegancia con el humor. “Siempre he admirado a Virginie, y cuando se me ocurrió la historia de esta película pensé que sería perfecta”, explica Gherardo Felloni. «Tiene una presencia muy enigmática, y eso es exactamente lo que quería ver en la pantalla». La idea atrajo a Virginie Ledoyen: “Inmediatamente quise sumergirme en este mundo”, confiesa la actriz, “y divertirme con el guion, que es natural y elegante a la vez”.  Este equilibrio poco común de diferentes estilos, este juego de códigos, refleja el enfoque de Gherardo Felloni hacia Roger Vivier y los complementos que aparecen en la película son prueba de ello. El terciopelo amarillo del bolso luce aún más porque está bordado con pedrería, mientras que las botas rosas por encima de la rodilla, adornadas con plumas de avestruz, evocan glamour y fascinación. Al igual que los tacones de aguja plateados con pedrería y las mules rojas con su pequeño tacón adornado con una esfera de cristales como si de una pequeña bola de discoteca se tratase. Estas preciosas piezas son todas perfectas para regalar en Navidad: regalos para desenvolver con entusiasmo, complementos que hacen que la fantasía y el sueño sean eternos.  |
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